Historia: La Nobleza Negra. 3

El siglo XX

Para el siglo XX la guerra de espionaje, intrigas palaciegas y reuniones secretas estaba por terminar para la Nobleza Negra. Benito Mussolini, un ex socialista y declarado anticatólico había dado un giro a la derecha con el comienzo de la Primera Guerra Mundial, se volvió un fanático ultranacionalista, para Mussolini el socialismo era un declarado descaro y mentira, en Rusia la burguesía salía por una puerta y entraba por la otra vestida de rojo pues solo ellos sabían manejar el Estado; también detestaba la Democracia Masónica Liberal, cuyo interés no era otro sino poner en el Congreso y los Ministerios a aquellos que debían servir al grupo oligarca de la monarquía, en otras palabras, los representantes del pueblo solo lo eran porque se encargaban de mantener Italia a los pies del sistema capitalista que según el, prostituían a Italia a los monopolios y oligarquías. Mussolini entonces creo un nuevo sistema político en oposición a la democracia y al comunismo, le llamaría Fascismo.

¿Que es el Fascismo? Mussolini, predicó algo sencillo, algo simple, en vez de dictadura del proletariado como fin, dictadura de los más fuertes y aptos como medio, en vez de lucha de clases subordinación de todas clases al Estado para la grandes nacional, en vez de persecución religiosa vinculación amistosa con la Iglesia, en vez de ricos reaccionarios debían haber ricos revolucionarios, muy nacionalistas, administradores de la riqueza pública. Esto era la doctrina del fascismo.

Mussolini ahora daba un paso hacia la derecha, tendía su mano hacia todo aquel que quisiera ver una Italia fuera del control de masones y comunistas, que si bien no los identificaba en un mismo bando, ambos eran enemigos del fascismo, la tercera vía, como denominaron el fascismo, declaraba que lo que la democracia en su anti-clericalismo y el comunismo en su anti-religiosidad solo el fascismo podía terminarlo mediante una vinculación amistosa. Se inicio entonces una junta, reuniones, llamadas, la Nobleza Negra se divide entre los profascistas y los antifascistas, sin embargo los Papas Benedicto XV y Pio XI no creen en Mussolini, le consideran un demagogo. Su Santidad Benedicto XV leía en el fascismo una sarta de tonterías, un ultranacionalismo idéntico al fariseísmo que dio paso a la persecución violenta de cristianos en Judea durante el siglo I DC, pero, si algo en verdad horrorizaba al Papa era el tono anticatólico del mensaje fascista, Benedicto XV sabia que el Nacionalismo era dañino para el mensaje de Universalidad que la Iglesia Católica había predicado siempre.

El Partido Popular Italiano vs el Partido Fascista.

En 1919, Benedicto XV dio su aprobación a la nobleza negra para la creación del Partido Popular Italiano al mando del R.P. Luigi Sturzo, de esta manera el fascismo se gana un nuevo enemigo en Italia, los cristianos. Luigo Sturzo logro la alcaldía de una pequeña ciudad y abre el partido a toda Italia, como manual tenían la Doctrina Social de la Iglesia Católica formulado por León XIII. Viajaron por el mundo, en Alemania la débil república de Weimar había ayudado a los católicos de Baviera crear partidos de similitud doctrinal, se creaba entonces una red que partía desde Roma hasta Múnich. Detrás de esta red estaba la Nobleza Negra.

Mussolini desde Milán logra la creación de las Escuadras Fascistas y desde 1919 su Partido es cada vez más y más radical, sus miembros son prácticamente idénticos a los anarquistas o a los comunistas. Desde 1921 las violentas pugnas entre fascistas y socialistas recorrían el norte de Italia. En Roma, el rey Víctor Manuel III teme que esto estalle en revolución, desde agosto de 1921 el rey fue informado que los monárquicos eran una franca minoría en Italia frente a las nuevas corrientes políticas. El diagnostico era serio, el Reino de Italia estaba por caerse a pedazos y la monarquía corría el riesgo de abdicar, Mussolini lo sabía y planifico entonces su Marcha Sobre Roma con ayuda de Italo Balbo. Víctor Manuel III entonces usa su única salvación, la Iglesia Católica.

Desde 1879 las relaciones entre la Santa Sede y el Reino de Italia eran inexistentes, sin embargo ahora, el Reino estaba por colapsar, la incipiente Monarquía Constitucional Italiana era un castillo de naipes, y Mussolini se preparaba a soplar fuertemente hasta derrumbarle, la Nobleza Negra vio como su antiguo enemigo suplico ayuda al Papa, y la Nobleza inicio el cabildeo, el Partido Popular Italiano trabaja entonces ahora para frenar a Mussolini y su Fascismo. Sin embargo, Mussolini lanza la Marcha Sobre Roma, es hora de tomar el poder y la Nobleza Negra sufriría una catastrófica derrota debido a la traición del propio Monarca.

Mussolini pacta con el rey el fin de la democracia en Italia, y el rey Víctor Manuel III a cambio de seguir siendo el Rey de Italia pone a los pies del líder fascista a la oligarquía capitalista que tanto despreciaban los fascistas.

Luigui Sturzo y su partido serian proscritos, y llevados a la cárcel sus líderes. El Papa sabía que esto era una amenaza terrible, inicia entonces una ascendente guerra política entre el Estado Fascista y la Iglesia Católica, entre la Nobleza Negra y los Industriales Fascistas. Sin embargo, Mussolini temía que esto causara un conflicto revolucionario, en USA los católicos eran mas organizados y peligrosos, la National Catholic Welfare Council tenia profundos nexos con el Vaticano, si bien eran moderados, eran una amenaza y por el otro los Caballeros de Colon, radicales de derecha que no veían con buenos ojos el régimen fascista, si bien el gobierno norteamericano tenía relaciones comerciales con Italia, el poder de los católicos iba en incremento, nuevos ricos que competían con la burguesía protestantes tradicional en USA cuyos ideales eran ser un movimiento cada vez mas y mas fuerte. Mussolini necesitaba la aprobación de USA e Inglaterra para su régimen, así que hizo una astuta jugada política que nadie esperaría de este ex socialista.

CONTINUARA…

Bibliografía:

• La Iglesia Romana y la Revolución. Crétineau-Joly.

• Chiesa e Stato in Italia negli ultimi cento anni. Arturo Carlo Jemolo.