2 nov 2012

Esjatologia: Apocalipsis. Parte VI.

 

La Iglesia de Filadelfia. La Conversión. (Futuro)

Al Ángel de la Iglesia de Filadelfia escribe: Esto dice el Santo, el Veraz, el que tiene la llave de David: si él abre, nadie puede cerrar; si él cierra, nadie puede abrir. Conozco tu conducta: mira que he abierto ante ti una puerta que nadie puede cerrar, porque, aunque tienes poco poder, has guardado mi Palabra y no has renegado de mi nombre. Mira que te voy a entregar algunos de la Sinagoga de Satanás, de los que se proclaman judíos y no lo son, sino que mienten; yo haré que vayan a postrarse delante de tus pies, para que sepan que yo te he amado. Ya que has guardado mi recomendación de ser paciente, también yo te guardaré de la hora de la prueba que va a venir sobre el mundo entero para probar a los habitantes de la tierra. Vengo pronto; mantén con firmeza lo que tienes, para que nadie te arrebate tu corona. Al vencedor le pondré de columna en el Santuario de mi Dios, y no saldrá fuera ya más; y grabaré en él el nombre de mi Dios, y el nombre de la Ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, que baja del cielo enviada por mi Dios, y mi nombre nuevo. El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
Libro del Apocalipsis. III, 7-13.

Se llegara a un punto donde la Fe estará decaída y la Iglesia totalmente destrozada por sus hijos infieles, ingratos y pecadores. Pero Dios nos dará un milagro, un milagro grande que todos veremos. Un milagro que hará que millones de católicos despierten y decidan volver a la Fe, se mostrar que la Iglesia Católica es la Iglesia de Cristo y aquellos que se proclaman católicos y no lo son se postraran ante Cristo y le reconocerán. Sera una etapa difícil pero abundante Paz Espiritual.

Lo prometido por Nuestra Señora en Fátima se ha de cumplir, el Papa muerto y la persecución de la Iglesia, pero como ella misma dijo. Al final, su Inmaculado Corazón triunfara.


Iglesia de Laodicea. La Edad de la Parusía. (Futuro)

Al Ángel de la Iglesia de Laodicea escribe: Así habla el Amén, el Testigo fiel y veraz, el Principio de la creación de Dios. Conozco tu conducta: no eres ni frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! Ahora bien, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, voy a vomitarte de mi boca. Tú dices: "Soy rico; me he enriquecido; nada me falta". Y no te das cuenta de que eres un desgraciado, digno de compasión, pobre, ciego y desnudo. Te aconsejo que me compres oro acrisolado al fuego para que te enriquezcas, vestidos blancos para que te cubras, y no quede al descubierto la vergüenza de tu desnudez, y un colirio para que te des en los ojos y recobres la vista. Yo a los que amo, los reprendo y corrijo. Sé, pues, ferviente y arrepiéntete. Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo. Al vencedor le concederé sentarse conmigo en mi trono, como yo también vencí y me senté con mi Padre en su trono. El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
Libro del Apocalipsis. III,14-22.

El antiCristo se manifestara cuando la Iglesia se sienta feliz, contenta, completa. Es decir, cuando sienta que es rica y poderosa, ahí, aparecerá el antiCristo. Semejante a la Quinta Edad, la Séptima cerrara con una visión terrible, la Iglesia sintiéndose sana estará enferma, sintiéndose poderosa tras la conversión de la época pasada, será humillada, perseguida y destrozada por el antiCristo. Serán tiempos difíciles, pero son tiempos finales.

Podríamos añadir mas cosas, especialmente lo dicho por san Agustin en Civitas Dei. Pero esta lucha clara entre el bien y mal tendrá su final en la Ultima Edad de la Iglesia.

CONTINUARA…